¿Alguna vez te arrepientes de no haber comprado un coral? Estábamos revisando las imágenes de nuestro teléfono recientemente cuando recordamos dos «Favia» que estaban a la venta cuando trabajábamos en un mayorista. Allí trabajábamos con miles de corales a diario, siendo Euphyllia glabrescens de colores los más vendidos con diferencia, y si un coral no explotaba o se balanceaba en la corriente, pocos minoristas, e incluso menos de sus clientes, estaban interesados en ellos. . Ese fue el caso de estas dos Dipsastraea, interesantes para el personal porque estaban sutilmente coloreadas y estampadas, pero eran difíciles de vender para la mayoría de las tiendas marinas. Nos llamaron la atención, sin embargo, su diferencia en el patrón frente a otros de su tipo, y deseamos haberlos comprado.
El verde se destacó por sus coralitos limpios pero muy espaciados, color de fondo verde caqui pero con pequeñas explosiones de rojo y amarillo alrededor de la boca. El otro tenía un color base púrpura apagado con toques de verde caqui alrededor de los coralitos y bocas rojas con centros amarillos. Vinieron cultivados de Indonesia y finalmente fueron comprados por una tienda de acuarios. Hemos visto algunos con bocas de colores y patrones similares desde entonces, pero han sido mucho más llamativos y fluorescentes, más olvidables y menos distintos que estos dos que nos encantaron. Al ser cultivados en mar, deberían volver a aparecer o, con suerte, las colonias originales están vivas y bien en algún lugar, incluso tal vez ahora viviendo como fragmentos. No tenían nombres comerciales hiperbólicos, por lo que su búsqueda será más difícil, pero por ahora seguirán siendo las dos Dipsastraea speciosa atenuadas que se escaparon…